“Paisaje en melodía” - Andrea Parmigiani
Alguien mira una película,
alguien corre con fervor,
alguien continúa la historia
de un libro con 300 páginas
sobre aventuras y viajes
que no terminó en verano,
alguien juega para superar
su único y propio récord.
Yo, a veces, canto una melodía
de manera suave y pausada
con la esperanza creciente
de que una memoria antigua
vuelva a surgir entre sus notas
y que las palabras ingresen al sonido
o que el sonido se una a ellas
como el manto de rocío fresco
que vi caer sobre el verde
apenas empezaba la madrugada
dos horas antes de llegar a destino,
brillando hacia el este
del otro lado del cristal.
alguien corre con fervor,
alguien continúa la historia
de un libro con 300 páginas
sobre aventuras y viajes
que no terminó en verano,
alguien juega para superar
su único y propio récord.
Yo, a veces, canto una melodía
de manera suave y pausada
con la esperanza creciente
de que una memoria antigua
vuelva a surgir entre sus notas
y que las palabras ingresen al sonido
o que el sonido se una a ellas
como el manto de rocío fresco
que vi caer sobre el verde
apenas empezaba la madrugada
dos horas antes de llegar a destino,
brillando hacia el este
del otro lado del cristal.