“El sonido de los árboles" - Robert Frost
Pienso en los árboles.
¿Por qué preferimos sentir
por siempre el sonido de estos
más que otro sonido
tan cerca de nuestra morada?
Nos afectan durante el día
hasta que olvidamos la medida del paso,
y la continuidad de nuestra dicha
y adquirimos un aire auditivo.
Ellos son eso que habla de partir
pero nunca se aleja;
y que habla nada menos que para saber,
a medida que crece más sabio y viejo,
que ahora significa permanecer.
Mis pies se estiran en el suelo
y mi cabeza se mece hacia mi hombro
a veces cuando miro los árboles mecerse
desde la ventana o la puerta.
Me dirigiré hacia alguna parte,
haré esa opción arriesgada
algún día cuando conversen
y se muevan ahuyentando
las nubes blancas sobre ellos.
Yo tendré menos que decir,
pero ya habré partido.
(Trad.: Andrea Parmigiani)