“Prefacio a las Baladas líricas" - William Wordsworth (fragmento II)
"Muchos de mis amigos están ansiosos por el éxito de estos poemas desde la creencia que, si las perspectivas con las cuales fueron compuestos se vieran, en efecto, realizadas, se hubiera poducido un tipo de poesía adaptada perfectamente al interés de la humanidad de manera permanente y, no menos importante, en la multiplicidad y calidad de sus relaciones morales y, considerando esto, me aconsejaron determinar de antemano una defensa sistemática de la teoría sobre la cual se escribieron estos poemas. Pero no quería realizar tal tarea porque sabía que, en esta ocasión, el lector analizaría fríamente mis argumentos ya que quizás se considere influenciado por mi punto de vista y por la esperanza egoísta y vana de un argumento que aprobara estos poemas en particular y estuve aún menos deseoso de llevar a cabo esta tarea porque, de acuerdo con mis opiniones y para reforzar por completo tales argumentos, hubiera necesitado un espacio sumamente desproporcionado para la índole de un prefacio. Porque para tratar un tema con claridad y coherencia hubiera sido necesario presentar un panorama completo del estado actual del gusto público en este país y para establecer cómo se encuentra no se podría determinar sin señalar la forma en que el lenguaje y la mente humana actúan y reaccionan en cada uno, sin recordar la evolución no solo de la literatura sino de la sociedad en sí. Por lo tanto, ya no abordaré de forma estructurada esta defensa porque sería inadecuado proponerla abruptamente al público sin reflexiones introductorias, poemas tan diferentes de forma material de aquellos sobre los cuales se obtiene aprobación general.
Se supone que mediante el acto de escribir en verso un autor establece un compromiso formal que gratificará ciertos hábitos conocidos de asociación que, de este modo, no solo da a conocer al lector acerca de las ideas y expresiones que encontrará en este libro sino otras que no se incluyen. Este exponente o símbolo sostenido mediante la métrica debe haber provocado en diferentes épocas literarias, muy diferentes expectativas: por ejemplo, en la época de Catulo, Terencio y Lucrecio y en la de Estacio o Claudio y, en Inglaterra, en la época de Shakespeare y Beaumont y Fletcher, Donne y Cowley, Dryden o Pope. No me corresponde determinar la importancia exacta de la promesa que, mediante el acto de escribir en verso, un autor en los días actuales hace a su lector: pero parecerá, sin dudas, para muchas personas que no he cumplido los términos de un compromiso contraído voluntariamente. Quienes se hayan acostumbrado a la fraseología sin estridencia e insustancial de muchos de los escritores modernos, si persisten en leer este libro hasta el final, sin dudas, tendrán que lidiar con los sentimientos de extrañamiento e incomodidad: buscarán la poesía y serán impelidos a preguntarse qué tipo de cortesía pueden permitir estos intentos para asumir ese título. Espero, por lo tanto, que el lector no me dejará de leer por intentar establecer lo que me propuse realizar y, además, (tanto como los límites de un prefacio lo permitirán) explicar algunas de las principales razones que me han determinado a elegir mi propósito: eso a menos que pueda escatimar cualquier sentimiento que, como autor, se establece como una tarea determinada".
(Trad.: Andrea Parmigiani)
Se supone que mediante el acto de escribir en verso un autor establece un compromiso formal que gratificará ciertos hábitos conocidos de asociación que, de este modo, no solo da a conocer al lector acerca de las ideas y expresiones que encontrará en este libro sino otras que no se incluyen. Este exponente o símbolo sostenido mediante la métrica debe haber provocado en diferentes épocas literarias, muy diferentes expectativas: por ejemplo, en la época de Catulo, Terencio y Lucrecio y en la de Estacio o Claudio y, en Inglaterra, en la época de Shakespeare y Beaumont y Fletcher, Donne y Cowley, Dryden o Pope. No me corresponde determinar la importancia exacta de la promesa que, mediante el acto de escribir en verso, un autor en los días actuales hace a su lector: pero parecerá, sin dudas, para muchas personas que no he cumplido los términos de un compromiso contraído voluntariamente. Quienes se hayan acostumbrado a la fraseología sin estridencia e insustancial de muchos de los escritores modernos, si persisten en leer este libro hasta el final, sin dudas, tendrán que lidiar con los sentimientos de extrañamiento e incomodidad: buscarán la poesía y serán impelidos a preguntarse qué tipo de cortesía pueden permitir estos intentos para asumir ese título. Espero, por lo tanto, que el lector no me dejará de leer por intentar establecer lo que me propuse realizar y, además, (tanto como los límites de un prefacio lo permitirán) explicar algunas de las principales razones que me han determinado a elegir mi propósito: eso a menos que pueda escatimar cualquier sentimiento que, como autor, se establece como una tarea determinada".
(Trad.: Andrea Parmigiani)